En el siglo dieciocho , cuando la orquesta era mas pequeña , el director solía sentarse al clavicémbalo , y acompañar a los demás instrumentos, llevar al compás mover la cabeza y dirigir.
Ahora cuando vamos a un concierto vemos al director parado en un podio. Lleva el compás desde el principio al fin con una batuta o con las manos.
Los músicos aprenden sus partes ensayando antes del concierto. A veces el director lee la partitura y otras dirige de memoria. Los ejecutantes observan las señales del director y nunca deben tocar de memoria . Un director tiene que tener un oído maravilloso que le permita escuchar el menor error entre todos los instrumentos.
El verdadero trabajo del director es interpretar la obra, recrearla . El trata de imaginarse el efecto que quiso darle el compositor. La interpretación de una obra es importantisima . No hay dos directores que se sientan e interpreten una obra exactamente del mismo modo.
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